EL CASTRISMO VENDIÓ SU VOTO EN LA ONU
El 30 de septiembre el periódico estadounidense “The Wall Street Journal” (WSJ) publicó que ante los daños causados por el huracán Ian el gobierno de Estados Unidos había recibido un pedido de ayuda del gobierno en Cuba. Cuando los periodistas consultaron a un funcionario del gobierno de Biden, sobre el asunto respondió que era cierto y que estaban esperando que de Cuba les dieran detalles sobre la solicitud. Su respuesta confirmó la noticia publicada por el WSJ.
Cuba
Independiente y Democrática (CID) inmediatamente envió una carta a Brian
A. Nichols, Subsecretario de Estado de la Oficina de Asuntos del
Hemisferio Occidental en el Departamento de Estado, planteándole que la
ayuda debía brindarse directamente al pueblo cubano porque si se daban
al régimen no sería repartida con un criterio de necesidad a los
damnificados, sino por conveniencia política entre los aliados e
incondicionales del gobierno. No se supo más del tema…
Doce días
después, el miércoles 12 de octubre, la Asamblea General de la ONU votó
mayoritariamente condenando a Rusia por la anexión ilegal de
territorios ucranianos. Para sorpresa de todos la delegación castrista
no apoyó a Putin con su voto sino que se abstuvo de votar. Sorpresa,
porque el régimen de la Isla ha estado respaldando firmemente la
invasión de Rusia a Ucrania.
Una sorpresa se suma a otra porque
ese mismo día la ONU anunció un plan de ayuda al gobierno cubano por un
total de 42 millones de dólares para los damnificados del huracán Ian. A
tal ofrecimiento la dictadura contestó:
"En nombre del pueblo y
Gobierno de Cuba agradecemos el valioso apoyo del Sistema de Naciones
Unidas a nuestra recuperación del huracán Ian. Su aporte permitirá
beneficiar a muchas familias damnificadas", escribió en Twitter el
canciller cubano, Bruno Rodríguez. Fuente EFE 13 de octubre.
El
gobierno de los Estados Unidos, que logró por su cabildeo entre los
estados miembros de la ONU, una condena impresionante a Rusia, no hizo
ningún esfuerzo por condicionar la ayuda de 42 millones de dólares a una
tiranía, cuya fama de corrupta e incompetente es harto conocida.
Es
muy difícil no llegar a otra conclusión que la tiranía castrista vendió
su voto en la Asamblea General y que a cambio el gobierno de Biden no
se opuso a los 42 millones que la ONU entregara a la dictadura en la
Isla. Esos millones, en todo o en parte, serán usando por el castrismo
para evitar un levantamiento del pueblo.
Huber Matos Araluce
San José, Costa Roca
Octubre 17 2020