¿SE PODRÁ DERROCAR AL RÉGIMEN CON MANIFESTACIONES PACĺFICAS?
El pasado sábado 6 de mayo en Caimanera, Guantánamo, Cuba, cientos de compatriotas salieron a las calles de este pueblo, de aproximadamente 10.000 habitantes, a protestar pacíficamente por la falta de comida y de libertad. Los videos publicados son prueba indiscutible de lo que realmente sucedió, como también lo son de la injustificada represión de la dictadura. Pero, ¿Se podrá derrocar al régimen con manifestaciones pacíficas? O la resistencia pacífica es solamente una táctica antes de pasar a otra.
Sería un error creer que las protestas públicas en años recientes no han sido muy importantes. Por medio de estos desafíos los ciudadanos se han sentido parte de un frente común contra el régimen. Ya saben que no están solos en su desencanto sino que son parte de la mayoría que aspira a una democracia. Han sido claras señales de un cambio en la correlación de fuerzas entre el pueblo y la tiranía.
Este cambio ha impactado a miles de funcionarios, miembros las fuerzas armadas, del Partido Comunista y otras esferas que forman parte de la estructura de poder. Algo así como ustedes son una minoría fracasada y el pueblo no quiere lo que ustedes representan. Otro beneficio considerable es que estas demostraciones de descontento han puesto en duda en el exterior las supuestas bondades del régimen castrista.
El pueblo en las calles rechazando a la dictadura ha llevado a muchos a creer que la solución para lograr un cambio de régimen es un levantamiento popular en todo el país. Desde el exilio se espera el levantamiento final y en Cuba se repite que “algo tiene que pasar”. Hay que tener cuidado de que el entusiasmo en unos y la desesperación en otros nos lleven a conclusiones equívocas. Es una forma para el exilio de lavarse las manos sobre la solución del problema y para los que están en Cuba es una manera de esperar el milagro.
Al régimen la preocupan estas explosiones de protesta. Primero porque se pueden salir de control y segundo porque perjudican su imagen dentro y fuera de Cuba. Durante las manifestaciones del 11 de julio de 2022 la dictadura reconoció que en sus filas hubo disgusto por la represión que se usó contra el pueblo, especialmente contra jóvenes desarmados.
Entonces, para cambiar la narrativa dominante del momento (el descontento y la protesta nacional) y para enriquecer a corruptos en Nicaragua y en Cuba, la cúpula castrista ingenió una migración masiva de los más interesados en huir de la Isla. Creyeron que la válvula de escape hacia Nicaragua funcionaría como en el pasado (Camarioca y Mariel). Se equivocaron porque los que no pudieron comprar su huida, que fueron y son la mayoría, han reaccionado con mayor disgusto que, sumado al deterioro constante en el país, se han convertido en un tormento para la mafia castrista.
En estas circunstancias, como nosotros los demócratas estamos ganando y ellos los corruptos y represores están perdiendo, hay que meditar el rumbo a seguir, teniendo en cuenta las experiencias de Hong Kong, Irán, Venezuela, Birmania y Nicaragua, donde las protestas, algunas pacíficas y otras violentas, no han podido triunfar.
Hay momentos históricos en los cuales, por una visión equivocada, se pierde o pospone la oportunidad de alcanzar la libertad. Los cubanos, que tanto han sacrificado por un porvenir democrático, pueden ahora estudiar y poner en marcha una estrategia que conduzca finalmente a una patria “Con todos y para el bien de todos.”
Huber Matos Araluce
San José, Costa Rica
2 comentarios:
ASI. ES. LIDER
10 de mayo de 2023, 11:21Las protestas del pueblo deben despertar la conciencia culpable de las Fuerzas Armadas sin la cual no habría victoria. ? No hay en ese ejército cubano hombres o mujeres capaces de decirle a Raúl y Díaz Canel “basta ya de hacer sufrir al pueblo cubano?
11 de mayo de 2023, 1:23Publicar un comentario